En el Sillón Rojo con un icono del estilo: Garance Doré

La industria de la moda es como un jardín con muros: bella por dentro, llena de exóticos e imponentes especímenes. Posada en un seto encontrarás a la escritora de moda e ilustradora Garance Doré, cuyo blog del mismo nombre ha traído humanidad y carisma al mundo de la alta costura.

Para Doré, un buen estilo depende de una gran personalidad. Ella llama a su blog un “diario visual”, un lugar donde puede documentar a las personas que la inspiran. A través de su prosa coloquial y sus fotos sobrias revela con naturalidad una percepción del individuo detrás del sujeto.

Criada en Francia y viviendo actualmente en Nueva York, Doré es una cosmopolita moderna: aguda, inquisitiva y autoconsciente. Fue esta fresca combinación la que hizo aterrizar sus textos en el New York Times y en Vogue. El que ella y su novio, el bloguero Scott Schuman de The Sartorialist, ganaran el Media Award del CFDA (Council of Fashion Designers of America) en 2012, no fue un logro supremo en sí —porque la moda finalmente se sintió democrática.

Garance habló con nosotros sobre el crecimiento de su blog, sobre romper hábitos y sobre la importancia de ser graciosa.

Eres una bloguera francesa con una audiencia básicamente angloparlante. ¿Fue algo que te propusiste cultivar intencionalmente?
Es interesante. Lo que me empujó a empezar a bloguear en inglés fue que, cuando empecé a publicar fotos en el blog, la conversación sucedía en todos los idiomas. Pero obviamente en internet, si la gente —incluso si es de China— quiere que se lea su comentario, lo escribe en inglés.

Naturalmente empecé a responder en inglés. Mi blog es en francés y en inglés —así será siempre— pero sentí que el francés [como idioma] es más pequeño. Yo amo Francia, amo hablar en francés y lo hago mucho mejor. Mi inglés aún es terrible… Pero al mismo tiempo yo quería llegar a estas personas y ser capaz de crear una conversación más amplia.

Aunque tu estilo es clásicamente francés, quizá es menos conservador. ¿Quiénes son tu inspiración?
Pienso que el editor francés Emmanuelle Alt [de Vogue] es una de ellas. Jenna Lyons [de J. Crew] es temeraria. Hace lo que quiere: está cambiando la perspectiva de vestirse para la noche. Creo que eso es inspirador. No es que sea realmente mi estilo. Yo soy más discreta, pero me encanta lo que ella hace y pienso que siempre se ve fantástica.

¿Cómo derrochas en ti misma?
Compré un bolso Yves Saint Laurent hace dos días. Usualmente compro bolsos. No sé por qué, pero me encantan los bolsos y los zapatos. Pero el lujo más grande que me doy —y espero poderlo hacer más seguido— es que amo los masajes. Amo los spas. Es una mezcla: me consiento, hago que mi cuerpo se sienta bien y además me inspira mucho abandonarme entre las manos del masajista. Me llegan muchísimas ideas. Es realmente un ganar-ganar. Si pudiera, lo haría cada semana.

Cuéntanos acerca de la sección Career de tu blog. ¿Qué has aprendido de esas entrevistas?
Cuando hacemos las entrevistas nos enamoramos de las personas. He aprendido mucho, pero la mayor parte tiene que ver con mis lectores jóvenes. Eso es lo que me hace más feliz.

Cuando yo era joven, no tuve nada de esto. No tenía ninguna conexión con la industria. Estoy haciendo esto para mí cuando tenía dieciseis años y me emociono mucho cuando la gente me dice que le encanta el artículo de Career. Ahora a la gente le parece interesante, pero cuando empecé causaba extrañeza una entrevista de ese tipo en un blog de moda.

Pero uno puede ser cool en cualquier trabajo —puedes ser abogado y ser el abogado más cool. Sé dueño de tu mierda. Apropiate de ella y vuélvela cool. También por eso no quise entrevistar —con lo que me hubiera encantado— a Arianna Huffington, porque ella es obviamente alguien que es excepcional. No todos queremos ser así de excepcionales.

Se trata de mantenernos en la realidad y de dar herramientas reales para que los jóvenes piensen: “Ah, yo puedo hacer eso. Eso estaría cool”. Ese es el objetivo.

¿Cómo haces que tu vida se mantenga fresca e interesante? ¿Tienes algún sistema para asegurarte de estar probando cosas nuevas?
No, yo pienso que la vida te pone las cosas enfrente. Pienso que cada nueva etapa te da una experiencia diferente y un punto de vista distinto. Yo creo que si fuera la misma persona que era cuando empecé a los 20 años, estaría bastante aburrida de mí misma.

Yo solía ser muy curiosa acerca de determinadas cosas y ahora me dan curiosidad otras. Quiero contagiar mi blog de eso. Uso mi vida como fondo y esa es una de las razones por las que quiero abrir mi blog a diferentes voces. Es cool ver qué tiene que decir alguien de 20 años acerca de la moda. ¿Cómo la viven ahora? Es una generación totalmente distinta.

Eres pareja de un bloguero de alto perfil [The Sartorialist]. ¿Eres capaz de separar el trabajo de la vida personal?
Lo revolvemos todo. Nos encanta trabajar juntos y alentarnos el uno al otro. Emily, mi asistente, está acostumbrada a hablar con él sobre cosas de trabajo y yo creo que él tiene un mejor punto de vista que el mío. Es algo orgánico. Nunca nos lo hemos cuestionado.

Háblanos un poco acerca de lo nuevo en tu blog. Recientemente introdujiste una columna de amor y sexo…
Sí, es cierto. Siempre he pensado que un blog es algo vivo —tienes que hacer que crezca. Es como una flor o una planta o un árbol— tienes que agregarle unas cosas y quitarle otras, ¿sabes?

Pensé que algún día tendría colaboradores y que entonces yo hablaría de amor. Pero mi vida amorosa no es sólo mía, de modo que es un tema del que es un poco más difícil hablar.

Me gusta la diversidad; me gusta cuando se rompe el ritmo. Pienso que es importante romper hábitos, si no la gente se aburre.

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